En el momento que se lleva a cabo la compra de una vivienda, son muchas las gestiones que se deben tratar y llevar a cabo para poder disfrutar de la nueva casa sin que exista ningún tipo de problema en ella.

 

Una de las tareas más importantes y a menudo más desapercibidas, es la de contratar los servicios básicos de la vivienda desde antes de necesitar la vivienda, para, en el momento de ocuparla, poder contar con estos suministros activos.

 

Debido a la importancia de esta tarea, en este artículo, desde Selectra, trataremos el tema de la solicitud de los servicios de luz y gas en una vivienda, particularmente en una passivhaus, que pese a presentar unas necesidades energéticas muy reducidas, necesita contar con los suministros activos.

Suministro de gas natural, pasos para la solicitud del alta

Para comenzar a contar con el suministro de gas natural en una vivienda, en un primer momento se debe investigar si la propia vivienda cuenta con acceso a la red general de gas, pues si la vivienda no cuenta con este acceso, el suministro hasta ese punto será imposible.

 

Si tras comprobar el acceso, descubrimos que no podemos acceder a los servicios de la red general, disponemos de una serie de alternativas para el suministro, siendo la alternativa principal el contratar gas propano , que se comercializa mediante tres tipos de distribución, pudiendo ser estos:

 

  • Propano a granel, mediante la adquisición de un depósito que rellenan camiones cisterna de la compañía.
  • Propano envasado en bombonas de 11 o 35 kg.
  • Propano canalizado, para agrupaciones de viviendas que se conectan a un depósito común.

 

Si tras la comprobación, se presenta este acceso a la red general, podremos proceder a solicitar el alta; para ello, en primer lugar se debe estudiar el mercado energético, para en base a las necesidades y preferencias futuras estimadas de consumo, poder seleccionar la que se considere como la tarifa de gas más barata para el suministro.

 

En el caso del gas, podremos incluir el contrato de suministro tanto en el mercado libre, donde existen una gran cantidad de ofertas distintas para el contrato de gas, o el mercado regulado, en el que únicamente se aplica una tarifa para todos los usuarios, conocida como tarifa TUR de gas. Esta tarifa tiene la peculiaridad de que establece su precio a través del mercado mayorista y la ofrecen únicamente las comercializadoras de referencia.

 

Tras analizar las oportunidades y decidir la que resulte la opción más ventajosa para el contrato, se deberán agrupar una serie de documentos para aportar a la propia empresa seleccionada.

 

  • Dirección de la vivienda donde se encuentra el punto de suministro que se desea activar.
  • De la instalación de gas, se debe entregar el código CUPS.
  • De la persona que solicita el alta del gas natural, se solicita tanto la documentación personal como datos relativos al contacto.

 

Cuando se ha podido entregar esta información a la compañía comercializadora de gas deseada por sus condiciones, esta empresa facilitará los datos entregados a la empresa encargada de la distribución del gas natural en ese punto de suministro, para que compruebe y valide la información aportada.

 

Además, será la propia distribuidora la que se encargue de asignar la tarifa de acceso al gas para ese punto de suministro en base a sus estimaciones anuales de consumo para ese punto, pudiendo resultar una de las tres tarifas de acceso que se comentan:

 

  • La tarifa RL1 Para consumos menores de 5.000 kWh anuales de consumo de gas.
  • La tarifa RL2 Para consumos entre 5.000 y 15000 kWh anuales de consumo de gas.
  • La tarifa RL3 Para consumos entre 15000 y 50000 kWh anuales de consumo de gas.

 

Una vez llegado a este punto, en el que se tiene asignada ya la tarifa de acceso al servicio, se deberá esperar un plazo máximo de una semana para que se active el servicio, transfiriendo los gastos asociados al alta a la primera factura de gas natural que se reciba.

 

En el aspecto económico, este servicio conlleva unos costes, que variarán entre las comunidades autónomas y dependiendo de la tarifa que asigne la distribuidora, pudiendo tener un precio de 72 euros en los casos más económicos y 235 euros para los casos más caros.

Suministro luz, pasos para la solicitud del alta

El caso del servicio de luz, para su activación, los documentos a entregar a la compañía encargada son bastante similares que los necesarios para tramitar el alta de gas natural, para el que se debe entregar la siguiente documentación:

 

  • Dirección de la vivienda donde se encuentra el punto de suministro que se desea activar.
  • De la instalación de gas, se debe entregar el código CUPS.
  • De la persona que solicita el alta del gas natural, se solicita tanto la documentación personal como datos relativos al contacto.
  • Además, como diferencia respecto al gas natural, para el alta de la luz, se necesita seleccionar la potencia que será suministrada a la instalación, para la selección correcta de esta potencia, se recomienda un estudio de las necesidades energéticas de la vivienda de manera previa, para que la decisión sea lo más ajustada posible.

 

Cuando se dispone de estos documentos, será el momento de aventurarnos de nuevo en el mercado, en este caso buscando las tarifas de luz más baratas para la vivienda, para una correcta selección, se deben analizar todas las variables contractuales de las distintas compañías y decidir por la que más beneficios repercuta teniendo en cuenta las demandas de luz.

 

Una vez estudiadas las distintas opciones para contratar la luz y decidida aquella opción más interesante para elaborar el contrato, se le entregará a la empresa la documentación previamente recogida con el fin de formalizar el contrato de luz.

 

Al igual que pasaba con el mercado del gas, esta información será validada por la distribuidora, haciendo efectivo el alta en un plazo también inferior a una semana.

 

Para conocer el precio que supone la activación de la luz en un inmueble, se deben sumar los distintos costes que conlleva, que se resumen del siguiente modo:

 

  • Asociado al derecho de extensión; Por cada kWh se pagará 17,37 más IVA.
  • Asociado al derecho de enganche; Se pagarán 9,04.
  • Asociado al derecho de acceso; Por cada kWh se pagará 19,70 más IVA.